Hace ya mucho tiempo que desistí de comprender a las mujeres.
Por ello cada vez que una mujer se me acerca turbada y definitiva, mi cuerpo se estremece de gozo y mi alma se magnifica de horror.
Juan José ARREOLA
jueves, 11 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario